Cómo hacer limonada casera con cubitos de flores: una receta muy Pinterest

Cómo hacer Limonada Casera

Un sorbo de infancia y alegría

Recuerdo perfectamente la primera vez que probé la limonada casera. Era primavera, yo llevaba un vestido azul de cuadros y mi madre me había peinado con una coleta alta para que me durase todo el día. Era el cumpleaños de alguien de la familia y pusieron una bonita mesa con manteles blancos en la terraza desde la que veíamos el mar.

Recuerdo la curiosidad que me produjo ver aquella enorme jarra de limonada repleta de hielos de hierbabuena. Me pasé la tarde investigando cómo narices podrían haber traspasado esas aromáticas hojas verdes el hielo, hasta que ansiosa le pregunté a mi madre quién había hecho ese fantástico truco de magia.

A partir de esa tarde, la limonada casera con hielos aromatizados se convirtió en uno de mis refrescos naturales preferidos. Es un sabor que me conecta con la infancia, con las tardes largas de sol y risas, y que vuelve a mi vida cada vez que empieza el buen tiempo.

Por qué hacer tu propia limonada casera

La limonada casera tiene ese no sé qué que la hace especial. Refrescante, natural y fácil de preparar. Además, puedes personalizarla como quieras: añadiendo frutas, hierbas aromáticas o, como yo esta vez, unos cubitos de flores comestibles que la convierten en una experiencia digna de Pinterest (que nos gusta un bonitismo foodie).

La otra tarde, con la llegada del calorcete, me apeteció beber a sorbitos aquel recuerdo y preparé esta limonada casera con cubitos de flores que os traigo hoy.

Cómo hacer limonada casera paso a paso

Ingredientes

  • Flores comestibles (claveles, pensamientos o las que más te gusten)

  • 1 litro y 1/2 de agua Bezoya

  • 3 cucharadas colmadas de azúcar moreno

  • 5 limones

  • Unas hojas de menta fresca

Preparación de los cubitos de flores

  1. Deshoja las flores cortando los pétalos con los dedos.

  2. Rellena los huecos de la cubitera con los pétalos.

  3. Añade agua y congela durante un mínimo de 3 horas.

Preparación de la limonada casera

  1. Pela los limones y ponlos en un vaso batidor.

  2. Añade el agua Bezoya, el azúcar moreno y la menta fresca.

  3. Bátelo todo hasta que quede una mezcla líquida y homogénea.

Sirve la limonada, añade los cubitos de flores y deja que el aroma te lleve allá donde quieras volver.

Personaliza tu limonada casera

Puedes adaptar esta receta con un toque de jengibre, rodajas de pepino, frutos rojos o incluso un chorrito de agua con gas para hacerlo más burbujeante. Las posibilidades son infinitas y cada combinación puede contar una historia diferente.

Y a ti, ¿qué recuerdo te trae la limonada casera?

La cocina también es memoria y emoción. Cada receta tiene un aroma que nos lleva a un instante guardado en algún rincón del corazón. Esta limonada es mi llave a una tarde de primavera, una coleta alta, y una sonrisa con sabor cítrico.

 
 
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